Canal de Denuncias para empresas, empleados y proveedores
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La Normativa Whistleblowing, también conocida como la legislación sobre denuncias de irregularidades, establece un marco legal para la protección de los denunciantes en las empresas. Obliga a las empresas de más de 50 empleados, tanto de carácter público y privado, a implementar canales seguros y anónimos para que empleados, proveedores y colaboradores puedan reportar, sin temor a represalias, cualquier actividad irregular.
Un canal de denuncias es un sistema implementado por las organizaciones para permitir a empleados, proveedores y otras partes interesadas reportar de manera confidencial y segura cualquier tipo de irregularidad, mala conducta o violación de políticas dentro de la empresa. Estos sistemas garantizan anonimato y protección contra represalias a los denunciantes.
Según lo establecido en el Boletín Oficial del Estado (BOE), las empresas tienen un período de tres meses para adecuarse a la nueva legislación desde su entrada en vigor. Esta normativa establece dos fechas límite diferentes, basadas en el tamaño de la empresa:
Las irregularidades más comunes que se denuncian incluyen fraude, corrupción, incumplimiento de normativas de seguridad y salud, violaciones de derechos laborales, y prácticas antiéticas o ilegales. Estos canales están diseñados para capturar una amplia gama de preocupaciones, desde problemas menores hasta infracciones graves.
La nueva normativa Whistleblowing afecta principalmente a empresas con más de 50 empleados, tanto de carácter público y privado.
La Normativa Whistleblowing establece un sistema de multas y sanciones detallado para garantizar el cumplimiento de la regulación. Las sanciones varían según la gravedad de la infracción y si el responsable es una persona física o jurídica: